En la escuela primaria Parley’s Park, los educadores están implementando Disciplina Consciente (Conscious Discipline), un programa socioemocional diseñado para ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades de autorregulación mediante la comprensión y el manejo de sus emociones. Este concepto se basa en investigaciones del cerebro que desplazan el enfoque de la disciplina tradicional, centrada en las consecuencias para detener una conducta, hacia un modelo relacional que promueve el autocontrol, la empatía y la conexión para resolver conflictos. Un ejemplo que Parley’s ha utilizado para enseñar estas habilidades son las nuevas instalaciones artísticas en el patio de recreo llamadas “Máquinas del Tiempo” (Time Machines).
“Decidimos llevar las Máquinas del Tiempo al patio de recreo para ofrecer a los estudiantes una herramienta concreta y de apoyo que les permita resolver conflictos en tiempo real”, explicó la consejera de Parley’s, Heidi Gwinn. “Como muchos de los desafíos sociales y desacuerdos ocurren durante el recreo, queríamos proporcionar un espacio visual y físico para que los estudiantes practiquen los pasos de la Disciplina Consciente que aprenden en la clase de Habilidades para la Vida. Las Máquinas del Tiempo favorecen el bienestar estudiantil al enseñar regulación emocional, empatía, comunicación y resolución de problemas de manera segura y estructurada”.
Financiada mediante una Subvención Exprés de la Fundación Educativa de Park City (PCEF, por sus siglas en inglés), la artista local Emily Miquelon pintó las Máquinas del Tiempo. Creó dos zonas en el patio, cada una con versiones en inglés y en español, para garantizar la accesibilidad de todos los estudiantes.
La instalación se completó hace apenas unas semanas y los estudiantes han comenzado a utilizarlas. “A veces los niños se acercan por iniciativa propia cuando identifican un conflicto, y otras veces un profesor o un asistente de recreo los guía hacia allí si observa que necesitan ayuda para resolver algo”, explicó Heidi. “El proceso normalmente implica que los estudiantes se coloquen sobre el tapete, utilicen el lenguaje estructurado que han aprendido (‘No me gusta cuando…’ / ‘La próxima vez yo…’), respiren profundamente y acuerden una solución, con apoyo de un adulto si es necesario”.
Foto: Estudiantes de cuarto grado de Parley’s siguen los pasos para utilizar la Máquina del Tiempo:
1.) Retroceder en el tiempo.
2.) Pedir disposición para resolver el problema.
3.) Respirar como una S.T.A.R. [E.S.T.R.E.L.L.A.] (Sonríe, Toma una respiración profunda y Relájate).
4.) Desearse bienestar mutuamente utilizando el “Árbol de los Corazones”.
5.) Unirse diciendo: “¡Hagámoslo!”.
6.) Exponer el problema y la solución deseada (“No me gusta cuando tú… La próxima vez, por favor…”).
7.) Conectar con un gesto amable para demostrar que no hay resentimientos.
Si bien aún es pronto para determinar el impacto de las Máquinas del Tiempo, se espera que los estudiantes estén más dispuestos a intentar resolver problemas sin que estos escalen hasta un profesor o sin alejarse frustrados.
“El objetivo es que los estudiantes asuman una mayor responsabilidad sobre su comportamiento y estén más dispuestos a escucharse entre sí”, dijo Heidi. “En general, esto debería contribuir a crear un ambiente de recreo más solidario y emocionalmente seguro”.
La PCEF se enorgullece de apoyar iniciativas impulsadas por educadores como esta, que fortalecen el bienestar estudiantil y generan nuevas y significativas oportunidades de aprendizaje en todas nuestras escuelas.

